Movilidad Geográfica.

Opinión

Movilidad Geográfica.

La frase "No me han llamado para la entrevista porque no vivo directamente en la ciudad donde estaba la oferta de trabajo" puede sonar sorprendente en muchos países, pero en España, es una realidad palpable. La movilidad geográfica, o la falta de ella, ha emergido como un tema cultural y social que impacta directamente en la economía del país.

No todo el mundo está dispuesto a hacer las maletas y mudarse a otro lugar por un trabajo. Hay quien prefiere mantener la estabilidad social y familiar, y eso es una elección totalmente legítima. Sin embargo, en España, donde la mayoría de la población reside en viviendas de propiedad, la movilidad se ve limitada, ya que es más sencillo mudarse cuando se vive de alquiler.

El problema viene cuando son las empresas las que dicen "no" a la movilidad. Esto no solo les quita la oportunidad retener talento, sino que también les da un golpe en la competitividad. Es un problema arraigado en la cultura empresarial española que, honestamente, creo que debería cambiar.

Todo esto no solo hace que las empresas no puedan retener talento, sino que básicamente lo ahuyenta. 

No es solo mudarse de ciudad, también está el dilema de desplazarse al trabajo todos los días. Muchas empresas descartan candidatos que viven "demasiado lejos" sin ni siquiera considerar la opción de que cada día se desplacen 40 kilómetros esgrimiendo razones como el tráfico o las irregularidades en el transporte público. Por otra parte, en España, los trabajadores tampoco se pueden desgravar los gastos diarios de transporte en impuestos. ¡Es un sinsentido!

Todo esto no solo hace que las empresas no puedan retener talento, sino que básicamente lo ahuyenta. Necesitamos un cambio cultural urgente, pero también algunas medidas por parte del gobierno para fomentar esa movilidad que parece tan esquiva.

En Alemania, donde actualmente resido, la situación es diametralmente opuesta. Tienen hasta un verbo para describir el ir y venir diario al trabajo: “pendeln”. Los trabajadores pueden deducirse todos los gastos de transporte al trabajo, ya sea en transporte público o con su propio vehículo. Y ojo, también pueden desgravar todos los gastos de mudanza, incluso si vienes de otro país.

Las administraciones españolas podrían beneficiarse tomando nota de estas medidas alemanas para evitar la fuga de talentos y promover la competitividad empresarial. Sería necesario que estas administraciones lideren un cambio cultural que, en última instancia, beneficiaría la economía del país. La incentivación fiscal para la movilidad y mudanzas podría ser un paso crucial para alinear los intereses de las empresas y los trabajadores impulsando de la economía del país.